Una de las principales medidas para conseguir este objetivo va a ser llevar a cabo recogidas selectivas de bioresiduos puerta a puerta a partir de 2017 en 10 barrios de la ciudad. Esta medida se realizará en una primera fase, ya que lo que se pretende es que el sistema de recogida se extienda a toda la capital de Francia para conseguir generalizar este tipo de recogida selectiva.
Por otra parte, París ha puesto en marcha durante los últimos meses diversas campañas de comunicación sobre este tipo de reciclaje en colaboración con Eco-Emballages, que han incluido carteles, guías de reciclaje, pegatinas para contenedores, libros, páginas web y otros materiales de comunicación, con el objetivo de concienciar a la ciudadanía. En esta campaña van a participar “90 embajadores” que intentarán trasladar, movilizar y fomentar buenas prácticas de reciclaje en unas 70.000 personas.
Para conseguir el objetivo que pretende este plan de estímulo para París quedan muchos otros aspectos que hay que mejorar. Por ejemplo, es muy importante corregir determinadas situaciones que dificultan el reciclaje para los ciudadanos, como la de 10.000 edificios que todavía no tienen contenedores para la recogida selectiva de papel y plástico. Otro caso llamativo es el de los 20.000 edificios que todavía carecen de contenedores de vidrio.
Este plan de fomento de reciclaje que va a emprender la ciudad de París contará con un presupuesto de 2,3 millones de euros. De ellos, 2,1 van a ser proporcionados por la citada empresa Eco-Emballages. Ésta es una empresa privada francesa con licencia del estado que desde hace 20 años trabaja para reducir el impacto de los envases en el Medio Ambiente y por una mejor organización del sistema de clasificación y reciclado, así como por el fomento del reciclaje a todos los niveles y la optimización de los procesos de recogida. Su objetivo es reducir el impacto medioambiental que se deriva de los envases. Realiza acciones como dar incentivos financieros, herramientas y capacitación para ayudar a las empresas a seguir este camino sostenible.
De forma complementaria a este plan para la ciudad de París se van a añadir 190 contenedores de aportación voluntaria. Además, se instalarán en el espacio público alrededor de 40 Trilibs, que son espacios de selección multiflujos y que pondrá a prueba Eco-Emballages en una fase de testeo, para asegurar su correcto funcionamiento, en cinco distritos de la ciudad.
Hay que señalar un dato importante: el porcentaje de residuos domésticos que se recicla en París actualmente es de un 16%, mientras que un 80% de estos residuos son incinerados y un 4% va a parar a los vertederos. Por lo tanto, el objetivo de alcanzar un 50% de reciclado doméstico es ciertamente ambicioso. París se propone conseguirlo a través de todas las medidas citadas.
