La planta de reciclaje premiada comenzó sus operaciones en el pasado mes de enero y se inició en el sector con una alta consideración por parte de los expertos en este mercado que la calificaron de inmediato con una de las más modernas y eficientes en su país.
Sus orígenes se remontan al año 2015, cuando la ciudad de Dallas adjudicó a la filial del citado grupo un contrato para poner en marcha una planta de reciclaje de un solo uso (MRF) para que se encargara del procesamiento de los materiales reciclables que generara la ciudad.
La planta de tratamiento dispone de una capacidad total de tratamiento de 140.000 toneladas anuales de diferentes residuos: reciclaje de metales, papel, cartón, plástico, vidrio, etc. No obstante, en este 2017 procesará alrededor de 80.000 toneladas.
El premio de la NWRA quiere reconocer el liderazgo de estas instalaciones en indicadores fundamentales como son la innovación, la cantidad de material procesado, los tipos de materiales tratados, las mejoras efectuadas en el lugar y las medidas de sostenibilidad con las que cuenta.
La planta de reciclaje de Dallas cuenta con la más avanzada tecnología en separación y clasificación, incorporando también separadores ópticos y maquinaria de clasificación gravimétrica. La planta tiene capacidad para tratar más de 40 toneladas de residuos reciclables mezclados provenientes de la recogida selectiva en el espacio de una hora.
La superficie total de estas instalaciones se extiende a lo largo de 5,3 hectáreas, que es el equivalente a 8 campos de fútbol. Está dividida en un espacio destinado a la planta de 5.400 metros cuadrados, un edificio de oficinas que abarca 840 metros cuadrados y un taller dque ocupa 300 metros cuadrados.
En esta planta se procesan desde primeros de año todos los materiales reciclables de la ciudad de Dallas y alrededores, y se seguirá haciendo a 15 años vista, con la posibilidad de extender el periodo otros 10 años más.
La filial de FCC se ha encargado también de la construcción de un centro educativo para niños y adultos destinado a la sensibilización y educación medioambiental y a la difusión de las mejores prácticas para la sostenibilidad y el reciclaje.
El volumen de negocio que se calcula para esta instalación de reciclaje gira alrededor de los 290 millones de euros (300 millones de dólares) a lo largo de toda su vida útil.
La ciudad de Dallas, una de las más contaminadas del mundo, está haciendo enormes esfuerzos para reducir el abandono de residuos en vertedero con el punto de mira en alcanzar un nivel de “cero residuos” de cara al año 2040.
