El próximo 29 de noviembre se celebra Black Friday, el evento comercial más importante del año, cada vez en más partes de todo el mundo.
El Black Friday es una fecha señalada en la que las tiendas ofrecen sus productos rebajados, con unas promociones que en ocasiones son las mayores del año.
Este evento está creado para incentivar la compra de estos productos por parte de los consumidores, con el fin de conseguir aumentar las ventas registradas, así como para estimular el consumo continuo las siguientes semanas, que es cuando tiene lugar la campaña navideña.
El objetivo se logra en prácticamente todos los lados donde se celebra Black Friday. Las ventas registradas anualmente han ido en crecimiento, tanto en establecimientos físicos como en comercio electrónico.
Pero no solo las ventas están al alza. También se produce un incremento imparable de residuos y, con ellos, de contaminación.
Todo el mundo a comprar: La importancia de reciclar en esta época
El consumismo representado en la compra de un producto, presenta un problema medioambiental en relación a la generación de residuos:
- El producto puede sustituir algo antiguo, con lo que se genera un residuo.
- El producto puede venir empaquetado, con lo que papel, cartón y plásticos son elementos de los que el consumidor debe desprenderse.
- El producto puede venir envuelto en papel de regalo, lo que aumenta los residuos derivados de esta compra.
- El producto debe ser transportado y, para mayor comodidad del consumidor, se suele vender acompañado de una bolsa, que puede ser de plástico o de papel.
Estos residuos están presentes en cada uno de los productos que se compran. El año pasado, se registró en Amazon un récord de ventas en Black Friday, de 10 productos por segundo. En un solo día se vendieron 940.000 artículos. Cada uno de ellos, con los problemas de residuos comentados.
Si además de Amazon sumamos todos los comercios del mundo, podemos ver de forma más clara el notable impacto que la contaminación de Black Friday puede ocasionar en el medioambiente, por la generación de residuos.
Esto nos lleva a otra conclusión, la necesidad de reciclar. Más que nunca, cuando el consumo está en su momento más álgido, debemos tanto concienciarnos en el reciclaje correcto de todos estos residuos, como también incentivar que las personas que conocemos también se animen a ello.
Es importante también que entre la acumulación de basura que se genera con estos productos, los que mayor peso están cobrando son los residuos electrónicos. Sobre todo por sustitución mediante la compra de un modelo nuevo de teléfono móvil, de pulsera inteligente o incluso de robot aspirador.
Black Friday, Cyber Monday, Navidad: Épocas de acumulación de residuos
Tras el Black Friday, el lunes siguiente se celebra el Cyber Monday, que mantiene el espíritu del viernes anterior, solo que se limita a la venta online.
Esto no exime a las compras de un problema de residuos y reciclaje. De hecho, el aumento constante del comercio electrónico está planteando todo un reto en relación a los embalajes de cartón utilizados para el envío de los productos.
Casi sin darnos tiempo a descansar, comienza la Navidad, la época de compras más longeva del año y también de las más productivas para las tiendas.
Las compras impulsivas se suceden durante todas estas semanas y siguen así hasta principios de año. Tras su finalización el ritmo de ventas no se quiere ver caer, así que comienzan en muchos sitios las rebajas.
Toda esta sucesión de incentivos para la compra de productos, tiene su impacto directo en el medioambiente.
Por tanto, ya compremos más o menos, lo importante es que todos los residuos que se generen por cada una de nuestras nuevas adquisiciones, sean gestionados y reciclados de la mejor forma posible.