La recogida selectiva es el proceso de separación de residuos que pueden realizar las personas de forma voluntaria en sus casas. Es decir, que es aquella separación que se realiza sobre residuos domésticos.
Contenedores de recogida selectiva
Para facilitar la recogida selectiva de residuos, desde finales del siglo XX están instalándose en ciudades de toda España, contenedores de colores, en los que es posible diferenciar los envases que se depositan en ellos.
En la actualidad, los contenedores de recogida selectiva siguen esta clasificación:
- Contenedor de recogida selectiva amarillo: Envases que tengan como material el plástico, así como latas que contuvieran bebidas o conservas.
- Contenedor de recogida selectiva azul: Envases que estuvieran fabricados con papel o cartón.
- Contenedor de recogida selectiva verde: Envases fabricados con vidrio, aunque hay bastantes excepciones como por ejemplo las bombillas, que no pueden ir en estos contenedores.
- Contenedor de recogida selectiva marrón: Residuos que sean de tipo orgánico y además biodegradables.
- Contenedor de recogida selectiva gris: Envases y residuos que no pudieran encajar en ningún otro contenedor de color.
- Contenedor de recogida selectiva rojo: Envases considerados peligrosos. No están en accesos fáciles como el resto de contenedores, sino en los denominados puntos limpios, donde puede acudirse a depositar los residuos.
- Contenedor de recogida selectiva naranja: Contenedores específicos para la recogida selectiva de aceite de cocina que esté usado.
Beneficios de la recogida selectiva
La recogida selectiva está cada vez más presente en nuestra sociedad por los importantes beneficios que ofrece:
- Facilita a todo el mundo ser partícipe de los procesos de reciclaje.
- Reduce la presencia de residuos en entornos naturales y vertederos.
- Permite una separación y clasificación de los materiales desechados mucho más rápida y eficiente.
- La recogida selectiva ayuda a reducir las emisiones de gases contaminantes en todo proceso de fabricación de productos.
