Este tema parece preocupar en el viejo continente, ya que el mismo Eurobarómetro revela que hasta un 52% de los europeos estima que la acción a nivel comunitario que se desarrolla en la actualidad es claramente insuficiente. En contraposición, el 37% la considera adecuada.
Actualmente, la Unión Europea tiene las competencias en términos de actuación en política medioambiental. Sus parcelas de trabajo incluyen diversos ámbitos a cada cual de mayor importante: el aire y la contaminación del agua, la gestión de residuos y el cambio climático-
Giovanni LaVia, presidente de la comisión de Medio Ambiente, señaló que dentro de la comisión se comparten las preocupaciones expresadas por la ciudadanía y que se trabaja constantemente en proyectos nuevos y en propuestas que puedan mejorar la lucha contra el cambio climático y la protección del Medio Ambiente.
Después de un evento de la magnitud y repercusión de la cumbre mundial del cambio climático de la ONU en París, quedan muchos objetivos ambiciosos que hay que ir cumpliendo. La Unión Europea contribuyo de forma definitiva al acuerdo y ahora trata de desarrollar las políticas para traducir en hechos positivos la esencia de dicho acuerdo.
Entre las medidas que está tomando la Unión Europea destacan algunas como Natura 2000, red de áreas naturales protegidas, que cubre el 18% de la superficie comunitaria y el 6% de su superficie marina.
Por otro lado, y en pleno cumplimiento de las conclusiones de la cumbre de París, las instituciones comunitarias llevan a cabo una reforma del sistema de comercio de emisiones en la Unión Europea, para reducir los gases efecto invernadero en un mínimo del 40% de aquí a 2030, y trabajan en legislación que permita impulsar la energía renovable.
Otro tema estrella es la calidad del aire de las ciudades europeas. De cara al año 2030, la comisión de la Unión Europa persigue el propósito de lograr un aire más limpio, con mayor control de emisión de las sustancias contaminantes (óxido de nitrógeno, partículas y dióxido de azufre…)
El Parlamento Europeo trabaja también en la transición de un obsoleto modelo de economía lineal al de economía circular, que persigue prolongar la vida útil de los residuos y los productos a través del pertinente reciclaje y la reutilización. En paralelo, se desarrolla una nueva normativa para la gestión de residuos.
Otra legislación aprobada por este Parlamento permitirá reducir de manera muy significativa el uso de bolsas de plástico en Europa.