Este gran aumento de ventas de este tipo de productos genera, a su vez, una enorme cantidad de residuos. Por ello, debemos ser especialmente cuidadosos y depositar los viejos aparatos en los puntos de recogida habilitados para tal fin.
Con este objetivo, la FER (Federación Española de la Recuperación y el Reciclaje) hace un llamamiento a todos los ciudadanos para que su consumo sea responsable durante la temporada navideña y para que hagan una gestión adecuada de los residuos eléctricos y electrónicos (RAEE). Para ello, pueden utilizar los puntos limpios municipales, los puntos de venta donde hayan adquirido el nuevo producto (recordemos que los puntos de venta están obligados por ley a facilitar este servicio de reciclaje del viejo aparato al adquirir uno de características parecidas), o pueden también dirigirse a red de gestores habilitados para su tratamiento.
Durante 2015, los fabricantes sacaron a la venta más de 68.748 toneladas de aparatos de informática y de telecomunicaciones, según los datos hechos públicos por el Registro Nacional de Productores de Aparatos Eléctricos y Electrónicos del Ministerio de Industria, Energía y Turismo.
Según informa la FER, los RAEE contienen residuos muy valiosos, de cobre, platino, plata, oro y paladio que, muchas veces acaban en vertederos o dentro de una red ilegal de gestores no autorizados. Por ello, apela a la concienciación de los ciudadanos como un factor fundamental para conseguir reciclar todos esos materiales y darles una segunda vida útil.
Los datos proporcionados por la Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos dan una idea de la importancia de tomarnos en serio el reciclaje y de gestionar estos residuos correctamente. Y es que por cada millón de teléfonos móviles reciclados, que vienen a pesar alrededor de 70 toneladas, se pueden recuperar 16 toneladas de cobre, 350 kilos de plata, 34 kilos de oro y 15 kilos de paladio.
En 2013 se recogieron en España 209.505 toneladas de este tipo de residuos RAEE. Dicho de otra forma, cerca de 4,5 kilos anuales por habitante. Son los últimos datos oficiales de los que se dispone, gracias a Eurostat.
Por indicación expresa de los organismos europeos reguladores de residuos, España es el primer país europeo que cuenta con objetivos legales de reutilización, que obligan a priorizar la reutilización frente al reciclaje. De cara al año que está a punto de comenzar, los objetivos de preparación para la reutilización, marcados por el Real Decreto 110/2015 sobre Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE), son los siguientes:
– 2% de los grandes aparatos recogidos durante el año (se considera gran a aparato a todo aquel que supera los 50 centímetros, excluyendo aparatos de frío, monitores y pantallas).
El 3% de aparatos de informática y telecomunicaciones recogidos durante el año.