La gestión integral de residuos consiste en el conjunto de soluciones basadas en gestión de los residuos que se generan en empresas.
Una de las soluciones que se está implementando cada vez con mejores resultados es la logística inversa.
¿Qué es la logística inversa?
La logística inversa consiste en estrategias volcadas a la recuperación de los residuos, ya deriven de la actividad productiva como del consumo de los clientes.
Por tanto, se basa en la creación de distintos canales con los que es posible hacer una recogida selectiva de los residuos para recuperarlos y someterlos a un proceso de reciclaje, adaptado a sus características y posibilidades.
¿Qué objetivos persigue?
Entre los objetivos de la logística inversa destaca sobre todo el que busca reducir la cantidad de residuos que se generan por las empresas y terminan en un entorno natural.
Además, con la logística inversa se busca cuidar todo lo posible el medio ambiente y conseguir espacios naturales libres de residuos.
Por otro lado, estas estrategias también ayudan a la propia empresa, dado que reduce el coste de aprovechar materiales con nuevas materias primas y se reduce también el consumo de recursos.
A todo ello debemos sumar la buena imagen que transmite la empresa y que es percibida por proveedores, clientes e incluso empleados.
Tipos de logística inversa
La logística inversa la vemos aplicada sobre todo dentro de dos tipologías diferentes.
- Por un lado tenemos la logística de residuos, que se basa en la recuperación de los residuos para reciclarlos.
- Por otro lado tenemos la logística de devoluciones, que se basa en la devolución del producto desde donde se distribuye hasta el centro de origen.
Cómo aplicar la logística inversa en la empresa
En la actualidad disponemos de varias estrategias con las que aplicar la logística inversa en la empresa y muchas de ellas han demostrado tener una gran eficacia. Estas son las más importantes:
Reacondicionamiento
Es una práctica que lleva haciéndose los últimos años con mucho éxito. Consiste en aceptar un producto devuelto y acondicionarlo de nuevo (por ejemplo, si presentaba algún defecto) para ponerlo a la venta por un precio menor al resto de productos idénticos.
Outlet
Otra estrategia de logística inversa es la de vender productos residuales o fuera de temporada, a un precio sensiblemente menor que los productos que son considerados novedades. Es un método con gran éxito en el sector de la moda. La empresa puede buscar deshacerse de stock para el que no tiene otra salida y sacar algún beneficio o incluso ninguno, pero recuperando su inversión inicial.
Canibalización
Recibe este nombre la estrategia de logística inversa con la que se recuperan los componentes de un producto para utilizarlo en otro más nuevo. Esta práctica lleva tiempo extendida en sectores como la automoción.
Servicio técnico
Otra estrategia muy conocida es la de ofrecer un servicio técnico, que básicamente consiste en arreglar un producto averiado, desechando componentes no válidos y aprovechando nuevos. Los componentes no válidos pueden igualmente ser reciclados y los que se colocan pueden ser también procedentes de otros productos a los que se ha aplicado la estrategia anterior.
